LA ORDEN DEL TOISON DE ORO 1

El año 1.429 tuvo lugar el acto fundacional de la Orden del Toisón de Oro, con motivo de las nupcias celebradas en Brujas, entre Felipe III, el Bueno, su fundador, e Isabel de Portugal, en el acto constitutivo, se dispuso que la soberanía de la Orden la ostentase, en todo momento, el jefe y cabeza visible de la Casa de Borgoña. En virtud de esta disposición, ocuparon la soberanía de la Orden, sucesivamente, su fundador Felipe III, Carlos el Temerario y María de Borgoña, esposa del emperador Maximiliano de Austria y, a la muerte de esta última, en 1482, la soberanía de los Países Bajos y, por ende, la de la Orden del Toisón de Oro, pasó a su hijo Felipe el Hermoso, si bien, bajo tutela paterna.

En Octubre de 1496 se celebró el enlace matrimonial entre Felipe el Hermoso, y Juana la Loca, hija de los Reyes Católicos y con ése enlace, el armorial matrimonial de la pareja pasó a ostentar, como adorno, el collar de la Orden. De este modo, el collar quedó definitivamente incorporado, hasta hoy, en los armoriales de los reyes de España.

El Capitulo general, máximo órgano asambleario de la Orden, se ha reunido en 17 ocasiones, todos ellos celebrados fuera de nuestro territorio, a excepción del que tuvo lugar en Barcelona, el año 1519.

En el devenir de la Orden se observan dos etapas claramente definidas; una primera, en la que el soberano residía en Flandes o Borgoña, con detentadores del Toisón de dichas tierras y, una segunda, en la que el soberano, en teoría residía en España y, junto a los nobles flamencos y borgoñones, había ya una nutrida representación de la nobleza castellana y aragonesa. En la primera etapa, el Capítulo se reunía prácticamente todos los años, mientras que, en la segunda, se fueron dilatando las reuniones, con periodicidad hasta de 15 años, para suspenderse las mismas, desde el año 1559.